Los patinetes eléctricos están de moda. Su crecimiento ha sido exponencial en los últimos años y su impacto en las calles de todas las ciudades y pueblos ha sido mucho más elevado del esperado. Es por eso, que la DGT, que en un primer momento decidió no regular su uso y dejarlo en manos de los ayuntamientos, ahora ha emitido una serie de instrucciones previas a su regulación. Unas instrucciones que el ayuntamiento seguirá como guía para la regulación de estos vehículos, que deben cumplir unos requisitos para entrar en la regulación vigente y no tener problemas con su uso que incluso puede requerir su matriculación en algunos casos. ¿Qué es un VMP? Un VMP es un vehículo de una o más ruedas con una única plaza y propulsado exclusivamente por motores eléctricos, y que no pueden superar una velocidad de 25 kilómetros por hora. Además, si tienen sillín, éste no puede estar situado a una altura superior a los 5'4 cm. Si no cumple estas características estará regulado por un Reglamento Europeo concreto diferente y no cumplirlo supondrá sanciones económicas importantes. Comportamientos de circulación Estas instrucciones de la Dirección General de Tráfico, señalan además algunos comportamientos detectados en la conducción de estos vehículos que serán considerados como infracciones y que, por tanto, serán sancionados con multas que pueden oscilar entre los 500 y los 1.000 euros. Con esta instrucción se pretende acabar con la confusión actual entorno a estos VMP que muchas veces, por desconocimiento, son considerados juguetes cuando no lo son. Las normas de circulación están siendo tramitadas, mientras, estas instrucciones son obligatorias y deben conocerse antes de adquirir un patinete eléctrico, ya que comprobar que cumplan las características es imprescindible para evitar ser sancionados y poder utilizarlo.
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